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¿La bichectomía envejece el rostro?

Esta pregunta surge a menudo, pero la realidad es más compleja de lo que parece. Si bien es cierto que la bichectomía es una cirugía que puede afinar las mejillas, su impacto en el envejecimiento facial varía según cada individuo. La clave está en la estructura facial de cada paciente. En aquellos con una buena estructura ósea, es decir menos prominente, la bichectomía podría resaltar este aspecto, dando una apariencia más hundida. Sin embargo, la eliminación de las bolsas de Bichat no causa envejecimiento per se, por lo que es una creencia errónea. Un cirujano experimentado evaluará cuidadosamente tu estructura ósea antes de recomendar este procedimiento, asegurándose de ofrecerte las mejores opciones para realzar tu belleza de forma natural y armoniosa.

La extracción de las bolas de Bichat, aunque considerada una intervención segura, conlleva ciertos riesgos que deben considerarse. Es posible experimentar hematomas temporales en las mejillas después del procedimiento, generalmente desaparecen en unos pocos días. La inflamación también puede presentarse, pero se controla con medicamentos recetados por el profesional. Además, los resultados definitivos pueden tardar meses en manifestarse por completo. Otros riesgos menos comunes después de una bichectomía que se puede mencionar están el adormecimiento, la retención de saliva y cierta pérdida de sensibilidad en la zona de la cara. Existe la posibilidad de cambios estructurales a largo plazo, ya que la cirugía afecta el soporte graso y óseo del rostro, especialmente en personas con rostros muy llenos y piel gruesa o mediana.